Imagínense que están paseando con familia y amigos, están en una trajinara en Xochimilco, todo es risa y diversión y de repente, el ambiente se torna lúgubre y a su lado, hay una tenebrosa isla llena de muñecas descuidadas.
¡No, no es un sueño! Una de las principales atracciones del Parque Ecológico Xochimilco, es una terrorífica isla llena de muñecas rotas y sucias que, según el habitante de la isla, es para espantar a los espíritus.
El dueño de esta macabra chinampa llamado Julián Santa Ana, dolido porque su antigua novia lo dejó por otro hombre, se mudó a esta zona a mediados del siglo pasado y se dedicó al cultivo. Era ermitaño y llamaba la atención porque recogía muñecas de la basura con las cuales decoraba su isla.
El señor Julián no revelaba la razón por la cual hacía tan extraña colección, aquel misterio perduró hasta que desapareció y su sobrino, Anastasio Santa Ana, continuó con las tarea. Fue él quien reveló la historia real detrás de las muñecas; hoy en día vive del turismo que atrae su macabra isla.
¿La leyenda?
Cuando el señor Julián llegó a la isla, una joven se ahogó en sus orillas. Desde entonces escuchaba voces, lamentos de mujer, sollozos y pasos, por lo que decidió protegerse con muñecas ya que había escuchado que de esta manera se “espantaba al espanto” –y los que nos espantamos fuimos nosotros-.
Cuentan por ahí que Julián Santa Ana siempre escuchó las voces y cada que iba a pescar con su sobrino Anastasio, veía a una sirena que deseaba se fuera con ella –y si algo aprendimos en Disney es que las Sirenas se enamoran y piden piernas, no secuestran-
Julián murió en el lago víctima de una insuficiencia cardíaca. En el exacto lugar donde él aseguraba que la sirena se lo llevaría.
Cómo lo vivimos nosotros:
La verdad sí nos asustamos y por eso le damos… ¡5 estrellas a esta tenebrosísima isla!
Ella es “La Moneca”, mejor conocida como Agustina ya que fue hallada el Día de San Agustín (28 de Agosto) y es la primera y más consentida muñeca del señor Julián, a ella se le piden deseos y se le realizan ofrendas, ya que algunas personas la consideran milagrosa. agosto, el Día de San Agustín.
La Isla de las muñecas ha desarrollado sus propias leyendas, por ejemplo, se rumora que en alguna ocasión un hombre –calenturiento- simuló tener relaciones sexuales con una de las muñecas, él… murió al poco tiempo.
Anastasio nos asustó contó que algunas veces los mecanismos descompuestos dentro de las muñecas llegan a funcionar y los muñecos sollozan, lloran, ríen, o llaman a sus madres –perdonen pero.. ¡Qué horrible!-.
Existe una advertencia que para todo el que visite el parque: “Hay de aquel que venga a Xochimilco y no visite la chinampa de Don Julián el señor de las muñecas, ya que seguramente el espanto lo espantará” –Por eso nos aventamos a conocer a nuestro amigo Anastasio, sobrino de don Julián, por si las dudas…-
Entonces…
¿Quién se anima a visitar la isla?
Galería de fotos:
Por: Ana Pau Bermúdez
Twitter: @AnaPauBedz
Instagram: ANAPAUBEDZ
Un comentario en “Cuentan por ahí: La Isla de las muñecas”