El presidente municipal de San Francisco de Conchos, Jaime Ramírez Carrasco, se reunió con el fiscal general del Estado, César Augusto Peniche, para tratar los temas relacionados con la inseguridad que acabó con la vida de cuatro elementos municipales y la estrategia que estarán desarrollando.
Durante la reunión, el alcalde pidió al fiscal general mayor presencia de elementos de seguridad para que atiendan los reportes y cualquier tipo de llamado que pueda surgir dentro de este municipio, ya que aseguró que la población tiene miedo de salir a las calles por los acontecimientos registrados desde el pasado domingo.
Comentó que le solicitó más elementos estatales o ministeriales que tengan destacamento en San Francisco de Conchos, ya que actualmente cuentan con seis elementos de seguridad y la mayor parte de los agentes se concentran en Camargo, que se ubica a por lo menos 30 minutos de trayecto.
“Lo que necesitamos es que nos envíen elementos de seguridad, que estén destacamentados en la comunidad, no que estén en otros municipios o puntos aledaños, porque estamos a 30 o 40 minutos de retirados y esto hace que las emergencias no se atiendan a tiempo”, comentó el alcalde de San Francisco de Conchos.
Dijo que tras la reunión, el fiscal general quedó en analizar las propuestas para determinar la acción que se realizaría en ese punto, quedando en uno o dos días resuelto para el mejoramiento de la estrategia de seguridad, ya que lamentó la baja de sus cuatro elementos en manos de la delincuencia organizada.
El presidente, Jaime Ramírez Carrasco, abundó que ante los hechos ocurridos a sus agentes de seguridad, no solicitará algún tipo de protección personal, ya que dice no deber nada a nadie y que su trabajo se realizada de manera honrada y honesta, “pero lo que sí necesitamos es que den protección al pueblo, porque no tenemos nosotros esa capacidad”, comentó.
Informó que el municipio de San Francisco de Conchos no tiene problemas importantes de inseguridad, incluso recuerda que el periodo más complicado que sufrieron fue en el año 2011, cuando se presentaron algunos delitos relacionados con el crimen organizado, pero que se habían tranquilizado hasta el pasado domingo cuando se registró la baja de estos agentes.
Jaime Ramírez agregó que los cuerpos de los cuatro agentes de seguridad fueron trasladados al municipio de Parral y posteriormente fueron enviados a Camargo, con el objetivo de llevar a cabo los honores fúnebres, a lado de sus familiares y amigos, seguido de los servicios religiosos hasta llegar al panteón.
“Vamos a pagarles el funeral a todos los elementos de seguridad, el Municipio va a cubrir todo lo necesario para los servicios fúnebres, pero también vamos a buscar la manera de entregar un fondo o bonos a los familiares como parte de su pérdida”, comentó el presidente municipal a El Heraldo de Chihuahua.
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